Soberanos de Oro - Años Específicos

La moneda de oro del Soberano tiene una profunda historia y es, sin lugar a dudas, la moneda más famosa de Gran Bretaña. Incluso hoy en día, sigue siendo un popular depósito de riqueza, así como un testimonio de la duración del Imperio Británico.

Acuñadas por primera vez en 1489, las monedas volvieron a producirse a partir de 1817, durante la Gran Recoinación de 1816, cuando Gran Bretaña decidió que el oro sería la "única medida estándar de valor" en todo el Imperio Británico en expansión y, por Proclamación Real, se confirmó como moneda de curso legal.

Para que la moneda circulara por todo el Imperio, se fabricó en varias sucursales de la Real Casa de la Moneda británica en la India, Canadá, Sudáfrica y Australia.

La Primera Guerra Mundial puso fin a la circulación de los Soberanos cuando el Gobierno hizo un llamamiento a sus ciudadanos para que renunciaran a sus Soberanos con el fin de financiar los esfuerzos bélicos y fue sustituido posteriormente por billetes. Desde entonces, el Soberano se convirtió en una moneda de lingotes, popular entre los inversores en oro.

A pesar de perder su lugar como moneda corriente, el respeto por la moneda no se perdió y desde hace mucho tiempo es muy admirada por los coleccionistas y los inversores en lingotes de oro.

Su reconocimiento mundial y su popularidad entre todos los coleccionistas e inversores en lingotes de oro son testimonio de su prestigio.